Se reunieron con ediles de Ecología y Medio Ambiente a raíz de un proyecto que plantea la prohibición paulatina de esos establecimientos.
El concejal Carlos Cardozo preside la reunión semipresencial a través de su computadora, desde el anexo Alfredo Palacios
La reunión virtual de Ecología y Medio Ambiente del miércoles 14 de octubre estuvo presidida por Carlos Cardozo, de Juntos por el Cambio. Lo acompañaron Mónica Ferrero, del bloque Socialista; Agapito Blanco, de Cambiemos, y Eduardo Toniolli, del Frente de Todos-PJ.
Asistieron los integrantes del Colegio de Médicos Veterinarios de la Segunda Circunscripción Victoria Beligotti, Elisa García y David Bosselli, entre otros profesionales.
Su presidente, Héctor Camilletti, había enviado una nota solicitando una audiencia a raíz de un expediente que logró acuerdos en Ecología y se encuentra en tratamiento en otras comisiones.
Se trata de una modificación de la ordenanza Nº 7.445/02 propuesta por Toniolli para prohibir la instalación de criaderos de perros y gatos; y permitir la actividad de los que se encuentran en funcionamiento solo por 5 años más, sin posibilidad de prórroga.
El texto señala que “solo podrán comercializarse ejemplares cachorros o adultos que sean debidamente identificados con microchips y libreta sanitaria” y con los correspondientes certificados de salud.
Cardozo explicó los avances alcanzados en iniciativas en defensa de los animales: programa permanente de esterilización, prohibición de mutilaciones estéticas e inclusive el de los criaderos.
García, explicó que desde el colegio defienden los establecimientos con control adecuado porque “las razas puras tienen un resguardo genético y algunos ejemplares cumplen funciones de guardia, seguridad, como lazarillos, e inclusive se utilizan en la detección de drogas, además de sus funciones sociales como animales de compañía”, según sus características genotípicas
La profesional consideró que “existe una normativa que regula los criaderos y que debería mejorarse, superarse, en vez de prohibirse”. Para ese objetivo propuso que «se trabaje de manera interdisciplinaria integrando organizaciones no gubernamentales, veterinarios junto al municipio”.
Otra de las razones esgrimidas para oponerse a la prohibición de criaderos es que favorecería a la clandestinidad. “Estamos a favor del control estatal y entendemos que se debe controlar la crianza, la higiene y desinfección, la vacunación y la venta de cachorros para defender la salud pública y el bienestar animal”
Belligotti se refirió a la necesidad de promover la “corresponsabilidad” y de establecer “un cambio de paradigma”
Boselli, solicitó que se explicaran los argumentos del proyecto y manifestó “no prohibir sino reglamentar ya que se trata de una actividad lícita”
Toniolli agradeció la participación de los profesionales y consideró que los criaderos ilegales ya están prohibidos. También señaló que «hay una necesidad de avanzar en políticas públicas para reducir la población de animales domésticos y que «ya hay localidades cercanas a Rosario que prohibieron establecimientos de crianza».
Además, ponderó la inclusión de distintas miradas y escuchar todas las perspectivas, aunque algunos posicionamientos resulten irreconciliables. “No es lógico habilitar establecimientos cuyo objetivo es la reproducción cuando queremos reducir la población de animales doméstico. Más cuando existe el objetivo de la mercantilización. A veces no coincidir también es parte del debate legislativo”, insistió.
Blanco opinó que “el proyecto está fundamentado y se encuentra en debate” en Ecología y en otras comisiones. “Estamos discutiendo y haciendo nuestro mejor esfuerzo para que las ordenanzas estén bien fundamentadas”, afirmó
Ferrero se manifestó a favor de incluir todas las miradas, y agradeció la participación de los médicos veterinarios. “Iremos construyendo síntesis de estas miradas y para que las ordenanzas las reflejen”. Además, dijo que existen diferencias a la hora de cuantificar las poblaciones de animales domésticos.