Representantes de las comunidades qom, colla, mocoví, mapuche y charrúa, analizaron diversos proyectos.
Se realizó en el recinto de sesiones el Parlamento de los Pueblos Originarios, promovido por la concejala María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, quien abrió la reunión, enmarcada con varias banderas de los pueblos originarios y otros símbolos de algunas de las etnias que participaron: qom –toba-, colla, mocoví, mapuche y charrúa.
Al dar la bienvenida a los participantes del Parlamento la concejala Gigliani destacó que el cuerpo recibe a instituciones, organizaciones, escuelas y en este caso a los pueblos originarios, respecto a los cuales recordó que en su momento presentaron “el proyecto para crear una secretaría de pueblos originarios, que resultó ser una dirección y el Consejo de Coordinación”.
Aludió al Parlamento de los Pueblos Originarios como la instancia “para que puedan tener voz propia, definir cuáles son las propuestas, los reclamos, las necesidades. Mejorar la vida de las distintas comunidades”.
De inmediato la edila Gigliani propuso a los integrantes de las diferentes etnias que eligieran al presidente, vicepresidente primero y segundo.
Propusieron algunos de los integrantes a Daniel Naporici, qom, mientras que otros propusieron para presidir la sesión del Parlamento a Marta Choque, colla, o a Néstor Purrán, mapuche, quien agradeció pero planteó que cedía “mi lugar al hermano Daniel”.
Tras diversas intervenciones y de manera unánime se eligió a Daniel Naporici, para presidirla; a Irene López, colla, como vicepresidente primera y a Graciela Castro, de la comunidad charrúa, en la vicepresidencia segunda.
En su agradecimiento Naporici, destacó que “este es el tercer Parlamento anual” y como mecánica de trabajo, propuso entre 5 y 10 minutos de intervención para cada uno de los que expusiera.
Por su parte la concejala Gigliani explicó que las diversas iniciativas que se votaran deberían redactarse luego como proyectos y tras ser presentadas por parte del Parlamento de Pueblos Originarios se derivarían para su tratamiento a las diferentes comisiones del cuerpo.
Ofelia Morales, de la comunidad qom, presentó un proyecto sobre “lenguas nativas” y pidió que “haya presupuesto para cada una de ellas” y especificó la idea respecto a que la señalética, por ejemplo en las plazas, se consigne también con las lenguas nativas, “para que haya paz, entendimiento y convivencia en la ciudad de Rosario”.
Recordó que en este año 2022, se inicia el Decenio Internacional de las Lenguas Nativas que se extenderá hasta el 2032, por lo que dijo que “sería muy lindo” que se pudiera concretar, para luego en lengua qom hacer referencia a “mi caminar, mi pensamiento y mi corazón”.
La iniciativa se votó de manera unánime.
Néstor Purrán, de la comunidad mapuche, planteó la necesidad de modificar la ordenanza que crea la Dirección de Pueblos Originarios y requirió que a su frente haya un representante de alguna de las etnias.
Igualmente solicitó la modificación de la reglamentación que rige el funcionamiento del Consejo de Coordinación y Participación de Políticas Públicas Indígenas y marcó que “nuestras comunidades son preexistentes al Estado-nación”.
Aseveró Purrán que “en esa Dirección tiene que haber una persona de los pueblos originarios” y consignó como ejemplo que el gobierno provincial sí designó en la Dirección de Comunidades de Pueblos Originarios a una representante de los mismos, Rosana Esquivel.
Fue precisamente Esquivel quien continuó en las exposiciones y dijo que “en Rosario hay 36 comunidades” y “es un derecho como hermanos y comunidades” la participación.
Al intervenir nuevamente Ofelia indicó que “entendía que había un proyecto de rechazo y de reclamo”, respecto al presentado por Purrán y sostuvo: “Bienvenido el reclamo y el rechazo”.
Tiburcio, por su parte, agradeció “el poder encontrarnos después de varios años” y estimó que “es muy constructivo el reclamo” para marcar que “la actual dirección atropelló nuestra lucha”. Agregó que “estoy contento de escuchar expresar este reclamo de manera madura y seria”.
Expresó asimismo sus críticas dado que consideró que “desde la Dirección de Pueblos Originarios se minimizó el reclamo sobre el agua”, temática sobre la cual pidió “se sienten a hablar la provincia, la Municipalidad y Aguas Santafesinas (Assa).
Coincidió en el reclamo respecto a la titularidad de la Dirección de Pueblos Originarios, Alejandro y sostuvo que “estamos postergados, aislados, discriminados”, aludió a que “sufrimos hambre” y al tema de las adicciones.
Marta Choque también reclamó la necesidad de la consulta a los pueblos originarios y lo fundamento en normativas internacionales y nacionales, entre ellas la Constitución.
Lino Chara, a su turno, también expresó críticas hacia la titularidad de la Dirección de Pueblos Originarios, mientras que otra de las representantes aludió a la necesidad de plantear formas de trabajo para los integrantes de las diferentes comunidades.
Talero, en tanto, igualmente coincidió en las críticas y planteó “la posibilidad de que un representante de los pueblos originarios sea concejal. Tener una voz propia dentro del Concejo. ¿Cuál es el problema?”, se preguntó.
Se votó como declaración la propuesta de Purrán.
Posteriormente Fabiana Gómez presentó un proyecto de salud intercultural bilingüe indígena, para poder trabajar en distintos aspectos en los territorios, mientras que otra de las representantes indicó que “ya lo venimos haciendo” al trabajo.
También recordó Fabiana la necesidad que se cumpla el proyecto que en su momento se votara en el Concejo de agentes sanitarios de los pueblos originarios en el marco del sistema de salud pública municipal.
Irene López recordó que “en el año 1996 se había aprobado en el Presupuesto Participativo una partida de 600.000 pesos para destinar la Estación Sorrento para la Casa de los Pueblos Originarios”, mencionó que el lugar se ocupó con algunas ferias, pero “con el tiempo y hago mea culpa nos hemos quedado”.
Propuso un pedido de informes respecto a “por qué se ha demolido la Estación Sorrento, sin habernos consultado a los indígenas”.
Mientras que Gastón Barrios propuso que pidan informes sobre las diversas obras, entre ellas pavimento o cloacas en barrios donde residen integrantes de las diferentes comunidades.
Sobre el final Graciela Castro, aludió a la importancia de “recuperar la identidad cultural” e hizo referencia al trabajo denominado La señal de la paloma, que realiza en tal sentido, que cumple 20 años y sobre el cual pidió se lo declare de interés.
Las diversas iniciativas fueron aprobadas por el Parlamento de los Pueblos Originarios, quienes trabajarán ahora para transformarlas en proyectos.