A fin de profundizar hábitos de separación, desde este jueves también se podrán desechar pilas, aceite usado, textiles, lámparas y tubos fluorescentes en Cafferata 729. Ya son 8 los puntos fijos.
Tras el favorable recibimiento que tuvieron los nuevos contenedores violeta para residuos especiales y el correcto uso que hicieron los vecinos de los mismos en cada lugar donde fueron emplazados, la Secretaría de Ambiente y Espacio Público de la Municipalidad decidió sumar uno más, esta vez en el Mercado del Patio. De esta manera ya son ocho los puntos fijos para descartar pilas, textiles, aceite de cocina usado, tubos fluorescentes y lámparas de bajo consumo.
Los nuevos contenedores poseen diferentes compartimentos para la recepción de los residuos clasificados. Los primeros fueron emplazados, en octubre de 2018, en cada uno de los CMD (disponibles de lunes a viernes de 8.30 a 13.30) y en Montevideo 2852 (de lunes a viernes de 8 a 14), en tanto desde este jueves 31 de enero las vecinas y los vecinos de barrio Agote y alrededores podrán hacer uso de la unidad instalada en el Mercado del Patio, Cafferata 729 (de martes a domingos de 9 a 21).
El balance trazado desde el área encargada de esta iniciativa es positivo. Con sólo tres meses de funcionamiento, estos contenedores ya recibieron 920 kg de pilas, 1.106,5 litros de aceite de cocina usado, 2.229 kg de materiales textiles, 23 lámparas de bajo consumo y 18 tubos fluorescentes.
La iniciativa obedece a que se trata de residuos que en muchos casos pueden reutilizarse y en otros deben recibir un tratamiento diferenciado por los materiales que los componen. Entre otros objetivos se busca separar de los residuos domiciliarios las pilas y baterías que están compuestas por un porcentaje de metales pesados que las convierten en residuos peligrosos, como también las lámparas de bajo consumo y tubos fluorescentes, que por lo tanto se disponen en un relleno de seguridad autorizado. Los materiales textiles, en tanto, se entregan a emprendimientos y organizaciones sociales que los clasifican y reutilizan. El aceite de cocina usado se recupera y transforma en biocombustible.