Desde los Organismos de Derechos Humanos, Gremiales y Sociales agrupados en el Espacio Juicio y Castigo de Rosario expresamos nuestro más enérgico repudio al ataque de neto corte fascista sufrido por el Comedor Barrial de Rafael Castillo el miércoles próximo pasado de parte de delincuentes anónimos.
Este ataque con bombas molotov contra el citado comedor y la casa de un compañero es continuación al que semanas atrás perpetraron contra una Unidad Básica.
La tarea del Comedor es llevada adelante por compañeros del Movimiento Evita que día a día trabajan colaborando para paliar las necesidades de los sectores más humildes de nuestra comunidad.
¿Qué es lo que pretenden estos delincuentes?¿Frenar el accionar de los espacios políticos que convergen en ayudar con su militancia al pueblo argentino? ¿Volver a etapas de odio y muerte contra los militantes populares, como acaeció en Argentina durante la época en que la Triple A se encargaba de amedrentar y asesinar a nuestro pueblo? ¿Revivir los métodos que la dictadura militar, civil, eclesiástica y empresarial empleó para someter a las luchas populares?
Pues sepan, delincuentes de escaso valor que lo único que ustedes logran es ganarse el repudio del pueblo argentino.
Ustedes son escoria absoluta sin ninguna expresión política, son solo delincuentes emparentados con lo peor que puede generar una sociedad.
A diferencia total de lo que significan los militantes populares como los compañeros del Movimiento Evita, que están junto a las necesidades de los humildes tratando de alivianar las secuelas que dejó el neoliberalismo que domino nuestro país los años de Macri hundiendo a la Argentina en la miseria.
Frente a estos hechos delictivos se debe actuar prontamente investigando a los autores de los mismos y castigándolos con que la ley determine para ellos. No nos cabe duda que estos delincuentes son solventados económicamente por el poder económico que sigue alentando estas maniobras para desestabilizar a un gobierno popular
.No vamos a permitir ningún ataque a sector, personas o institución que defienda el campo popular. Sabemos demasiado de esto pero también sabemos como no permitirlos. Argentina es uno de los pocos países en el mundo, sino el único, que castigó con la cárcel común y efectiva a los mayores genocidas de nuestra historia. Esta lucha no ha sido en vano y así seguiremos.
Basta de ataques de la derecha fascista a las organizaciones populares.! Investigación, juicio y castigo para los que intentan desestabilizar la democracia y a un gobierno popular! Basta de ataques a militantes populares y de Derechos Humanos!