A lo largo de más de seis horas, y luego de permanecer cerrado en el marco de la pandemia Covid-19, cientos de familias asistieron este sábado a la reapertura del Centro Científico, Tecnológico y Educativo “Acuario del Río Paraná”, enclavado en la ciudad de Rosario, que se suma a las propuestas y atractivos turísticos que brinda la provincia de Santa Fe.
“Estamos muy contentos con la reapertura del Acuario, porque es uno de los íconos más importantes de la ciudad de Rosario, en cuanto a vincular la ciencia con el turismo. Es una suerte de resumen de lo que nosotros expresamos como Santa Fe desde nuestra cartera; esa comunión de historia, ciencia y belleza natural”, aseguró el secretario de Turismo, Alejandro Grandinetti.
El Acuario abrió sus puertas de 13 a 19, y el público pudo hacer visitas de 20 minutos, en pequeños grupos y respetando protocolos sanitarios, de forma libre y gratuita. El lugar funcionó al 30 por ciento de su capacidad.
En ese marco, Grandinetti ratificó la importancia de “tener este acuario, el único en Latinoamérica donde uno puede llevar adelante investigaciones científicas, pero también acercar ese conocimiento y el desarrollo de la biodiversidad al alcance de todos los santafesinos y santafesinas, y a todos aquellos que quieran venir a visitarnos; es sumamente importante”.
Y pronosticó: “Es uno de los grandes atractivos que había sido ponderado por (el ministro de Turismo y Deportes de la Nación,) Matías Lammens cuando llegó a la ciudad de Rosario, y volver a tenerlo en funcionamiento nos llena de satisfacción, y nos hace augurar que vamos a tener una temporada con muchos atractivos y opciones para aquellos que nos vengan a visitar”.
Ciencia en el territorio
Por su parte, la secretaria de Ciencia, Tecnología e Innovación del Ministerio de Producción, Ciencia y Tecnología, Marina Baima, definió al espacio como “un símbolo de la provincia de Santa Fe en materia de investigación científica”, por contar con un Laboratorio Mixto de Biotecnología Acuática.
“Para nosotros es un orgullo hoy, siendo que el laboratorio, la parte experimental y de mantenimiento estuvieron activos, poder abrir en forma presencial. Es inédito para la provincia, que toda la población pueda disfrutarlo, vivir la ciencia y experimentarla, una nueva forma de divulgación. Y sus puertas están abiertas de manera gratuita, algo que nos parece sumamente importante, porque implica poner a la ciencia en el territorio”, añadió Baima.
Puestos de trabajo garantizados
A su turno, la subsecretaria de Proyectos Científicos y Tecnológicos de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación de la provincia, Eva Rueda, garantizó la continuidad y estabilidad laboral de todos los trabajadores del lugar: “A todos aquellos que quisieron continuar su vínculo con el Acuario durante este año se renovó el contrato, y durante el acuerdo paritario se acordó el pase a planta permanente, respetando funciones y antigüedades”.
Asimismo, indicó que la provincia se está haciendo “cargo de la situación de precariedad laboral, ya que el Acuario no tenía un solo cargo de planta permanente a pesar de esta maravillosa obra. Son alrededor de 20 trabajadores contratados que se ven favorecidos a partir de la creación de cargos”.
Y concluyó: “Durante estos meses se siguió trabajando y por eso hay que felicitar a las y los acuaristas, que han hecho una magnífica tarea; se adaptaron a los protocolos y no descuidaron en ningún momento este espacio, porque saben que es de todos y todas las santafesinas”.
El acuario
En la planta alta del edificio se ubica la sala de muestras y un auditorio para 100 personas. Desde este nivel también se propone un área de contemplación del paisaje del río Paraná y del Parque Autóctono.
Entre los diferentes tipos de peceras en las salas de muestras se destacan dos tubos cilíndricos con fondo acrílico visible desde el área de acceso en el exterior del edificio. Mientras que en la planta de acceso se ubican los laboratorios; las áreas de experimentación; piletones en tierra; biblioteca especializada; área administrativa, técnica y de servicios; y sanitarios.
El Acuario del Río Paraná es un espacio no solo para la observación y la recreación, sino también para la generación de conocimiento científico, la divulgación pedagógica de la biodiversidad autóctona y la toma de conciencia en el cuidado del medio ambiente.