Rosario/ Centro.
Gracias a la acción arriesgada de un joven pudo evitar que el automovilista ocasionará un desastre en la zona de Plaza Sarmiento, en el horario donde circulan decenas de transeúntes por el lugar.
Sucedió este viernes pasada las 19 horas en calle Entre Ríos y San Juan cuando un conductor de un automóvil Renault de color gris , según testigos, visiblemente alcoholizado chocó contra dos motos dos cadetes sin los ocupantes y trató darse a la fuga, en ese momento un joven lo persiguió a pie y se colgó al volante siendo arrastrado varios metros.
En ese instante, el automovilista le arrojaba golpes de puños para que el joven soltara el volante, éste ve que el vehículo iba hacía un niño hizo un “volantazado” terminando el recorrido contra la pared de una cochera de calle San Juan.
El joven terminó golpeado en el brazo y en la zona de las costillas del lado izquierdo, mientras que el conductor que se encontraba agresivo registraba algunos golpes leves, y rápidamente recibió los primeros auxilios por parte del personal del Sies.
Luego, inspectores municipales intentaron realizarle el test de alcoholemia, y el conductor en los tres intentos no pudo soplar negándose, fue causal de positivo. Que según testigos que se agolparon cerca de plaza Sarmiento estaba alcoholizado. Cabe recordar que cuando se efectúa los tres intentos y el conductor se niega o no logra soplar en el instrumento de medición, es considerado alcoholemia positiva.
Finalmente, el hombre fue trasladado a la comisaría 2ª, los inspectores actuantes retuvieron la licencia de conducir del infractor, quien fue remitida a la Dirección General del Tribunal Municipal de Faltas con las actuaciones y el vehículo llevado al corralón. Queda la acción civil por los daños contra la cochera y los rodados involucrados en el siniestro. Además, del joven golpeado que fue asistido por personal del Sies.
Vale destacar, que el Concejo Municipal aprobó el 8 de abril de 2021, la ordenanza Nº 10.182/21 que “prohíbe la concentración de alcohol en sangre más de 0 gramo de alcohol por litro de sangre, (Alcohol Cero al volante) para quienes conducen cualquier tipo de vehículo a motor existente en la vía pública y todo tipo de vehículo a motor registrado y homologado que se incorpore a la circulación en la vía pública”.
Los efectos del alcohol son directamente proporcionales a su concentración en sangre, presentando a mayor concentración, mayor deterioro, como ser:
· 0.15 a 0.2 g/l Disminución de reflejos
· 0.2 a 0.3 g/l Falsa apreciación de las distancias, subestimación de la velocidad
· De 0.3 a 0.5 g/l Excitación emocional, disminución de la agudeza mental y de la capacidad de juicio, relajación y sensación de bienestar, deterioro de los movimientos oculares
· De 0.5 a 0.8 g/l Aumento del tiempo de reacción, alteraciones en los reflejos, comienzo de perturbación motriz, euforia en el conductor, distensión y falsa sensación de bienestar, tendencia a la inhibición emocional, comienzo de la impulsividad y agresión al volante
· De 0.8 a 1.5 g/l Estado de embriaguez importante, reflejos muy perturbados y retraso en las respuestas, pérdida del control preciso de los movimientos, problemas serios de coordinación, dificultades de concentración de la vista, disminución notable de la vigilancia y percepción del riesgo
· De 1.5 a 3 g/l Embriaguez muy importante y notable confusión mental, cambios de conducta imprevisibles: agitación psicomotriz, fuertes perturbaciones psicosensoriales, vista doble y actitud titubeante
· Más de 3 g/l Embriaguez profunda, inconsciencia, abolición de los reflejos, parálisis e hipotermia, coma, puede producir la muerte.
Por lo tanto, toda concentración de alcohol en sangre, aún en mínimas cantidades, provoca alteraciones en atención dividida, funciones visuales y habilidades de conducción.