Desde las 11 hs estarán presentes en la exposición rural de Palermo diferentes organizaciones socioambientales, Climate Save Argentina en particular estará desde las 14 hs hasta las 17 hs.
Según un estudio reciente publicado en la revista Sustainability Science, el 95% de las tierras cultivables del país se utilizan para la industria ganadera, con tan solo el 5% restante dedicado a la producción de alimentos para el consumo humano.
«En una región con altos índices de pobreza, la producción de alimentos debería estar enfocada y centrada en la disponibilidad de comida para todos, no en el fomento de la industria de la carne. En un país con el 40% de personas sin posibilidad de tener un plato justo y saludable de comida sobre la mesa, el actual modelo de producción de alimentos demuestra no funcionar. Producimos comida para dar a animales que luego matamos para comerlos. Esto no es sustentable en el tiempo» sostiene Martín Vainstein, politólogo y co-coordinador nacional de Climate Save Movement.
El Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero marca que el 28% de esos gases provienen de la ganadería, registrando el mayor aporte a nivel país, superando al sector de transporte (14.8%) y de gestión de residuos (1.7%). Por su parte, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego indica que “el 95 % de los incendios forestales son producidos por intervenciones humanas”. Entre las primeras causas se encuentra el uso del fuego para la preparación de áreas de pastoreo”. Incendios, deforestación y explotación animal van de la mano.
En la última Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) en la que Argentina participó, se acordó en la necesidad de reducir sustancialmente las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el aumento de la temperatura global en este siglo a 2°C y esforzarse para evitar que este aumento suba a incluso más de tan solo el 1,5 °. Para cumplir con los compromisos climáticos asumidos, Argentina creó la Secretaría de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático la cual tiene como objetivo enfrentar el cambio climático y promover el desarrollo sostenible a partir de programas de innovación y nuevas formas de producción y consumo. Sin embargo, resulta contradictorio que no se prosiga con la Ley de Humedales mientras se fomenta la ganadería por medio de la ley de Régimen de Fomento Agroindustrial.
Desde el Acuerdo Basado en Plantas, se plantea abordar la problemática desde una perspectiva ambiental, de derechos humanos y animales y cuestionando nuestros hábitos alimentarios. La transición hacia sistemas alimentarios más justos, soberanos y basados en plantas es la punta de lanza para redefinir el modelo de producción y consumo actual y sentar las bases para un futuro con comida sana, libre de agrotóxicos e impacto ambiental.