En el marco de la política de conservación de la biodiversidad que lleva adelante el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, la cartera celebra que la provincia de Misiones haya declarado al carayá negro y dorado Monumento Natural Provincial y de Interés Público.
La medida se integra a los esfuerzos llevados a cabo mediante el Plan Nacional de Conservación de Primates, https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/255189/20211227 orientado a generar acciones para combatir las amenazas para las poblaciones de monos en el país.
Misiones implementa esta decisión mediante la Ley XVI – N.° 154 que prohíbe en todo su territorio la captura, caza, tenencia, transporte, exhibición, oferta, demanda, comercialización y acciones que puedan afectar la preservación, conservación o reproducción de la especie.
Estos monos tienen un rol fundamental como centinelas de enfermedades infecciosas —como la fiebre amarilla, a la que son más susceptibles— y sirven, con otros mamíferos, como barreras que disminuyen los saltos zoonóticos de patógenos a otras especies. También cumplen un papel de importancia como dispersores de semillas y polinizadores y ofrecen otros servicios ecosistémicos.
En Argentina son cinco las especies de primates presentes en algunos puntos del territorio: carayá negro y dorado o aullador negro y dorado (Alouatta caraya); carayá rojo, aullador rojo o aullador marrón (Alouatta guariba clamitans); mono de noche o mirikiná (Aotus azarae); el capuchino negro o caí misionero (Sapajus nigritus) y el capuchino de cabeza marrón o caí de las Yungas (Sapajus cay). Se trata de animales cuya conservación está en riesgo.
En particular, el aullador negro y dorado es una especie amenazada, que posee la distribución más austral de los primates en el Neotrópico. Tiene presencia en las provincias de Misiones, Corrientes, Formosa, Chaco y Santa Fe. La población del norte de Corrientes y sur de Misiones se considera en peligro, por lo que Corrientes ya había declarado a este mamífero Monumento Natural Provincial (Ley 6590).
El nombrado plan de conservación es un instrumento diseñado desde el Ministerio de Ambiente nacional, a cargo de Juan Cabandié, mediante la Dirección Nacional de Biodiversidad de la Secretaría de Política Ambiental en Recursos Naturales, en coordinación con otros organismos nacionales y de las provincias con presencia de primates en sus territorios. Incluye un conjunto de amenazas a partir de las cuales se establecen objetivos y acciones que procuran disminuir el riesgo de extinción.
Desde el punto de vista de la biodiversidad, la buena salud de un ecosistema es clave para evitar saltos zoonóticos que afecten a las personas. Cuando una especie se extingue, los agentes que causan la enfermedad no desaparecen y buscan infectar a otras. Un ecosistema empobrecido en especies tiene menos capacidad de resiliencia ante eventos extraordinarios.