La cuarta jornada de competencia olímpica tuvo protagonismo un deporte que crece en popularidad. Además, la rosarina Julia Arino se subió al podio de aguas abiertas ante los suyos.
El fin de semana definitivamente dejó ver el entusiasmo de los rosarinos y rosarinas por la competencia deportiva de alto nivel. Desde temprano, las gradas del estadio rojo y las instalaciones del Fan Fest se vieron plagadas de personas que no querían perderse el debut del handball o los múltiples entretenimientos gratuitos que ofrece el Balneario La Florida. Al igual que el sábado, más de 10.000 personas participaron de los Juegos Suramericanos de Playa.
El imponente estadio rojo, que durante el sábado supo alojar a miles de personas para las finales del beach voley, transformó su campo de juego para recibir las preliminares del handball, el indisputado plato fuerte del domingo. El deporte viene creciendo en popularidad en Argentina, especialmente desde la gran performance de ambos seleccionados en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, donde las chicas obtuvieron un histórico oro y los varones abrocharon el bronce.
Cinco de las entonces campeonas, incluida la joven rosarina Gisella Bonomi, forman parte de Las Kamikazes, que debutaron con una victoria frente a Chile ante un público más que entusiasta y repitieron el triunfo cómodo más tarde contra Perú. “Es un ambiente muy positivo. La verdad que da gusto jugar. Hay un montón de espectadores, así que estamos re contentas”, contó Bonomi al final de la jornada.
La selección masculina cayó en su primer partido ante Chile, pero logró dar vuelta su segundo encuentro ante Paraguay, imponiéndose por tiros libres. El público local realmente se destacó desde las gradas, haciendo sentir la localía a ambos equipos nacionales. Clubes de handball de la ciudad y de todas partes del país llegaron hasta La Florida para alentar en vivo a los jugadores y jugadoras. Las banderas colgaban mostrando presencia de Zárate, Chajarí y hasta Viedma, entre otros lugares.
“Jugamos al handball y apenas salieron las entradas vinimos a buscar para los tres días. Las dos selecciones tienen posibilidades de medalla, sobre todo las chicas que juegan zarpado así que acá vamos a estar sin falta haciendo el aguante”, contó Leonel, que llegó con su grupo de compañeros, portando camisetas argentinas y banderas y agitando los carteles de “Vamos Argentina” que los voluntarios reparten en los estadios.
El Fan Fest se vio más que nunca a pleno. Incluso durante las horas del mediodía, donde el calor y el sol se hacían sentir, los rosarinos y rosarinas llenaron cada espacio. Los juegos gratuitos como el paddle, el tenis de mesa, o el circuito inflable sobre el agua, convocaron sobre todo a los jóvenes. Mucha gente se asentó sobre la costa para disfrutar de la arena y el agua como cualquier otro domingo, pero acompañados por un marco más que especial.
“Es una maravilla esto. Vinimos ayer y volvimos porque está hermoso para pasar el día, incluso si no se puede ver ningún partido”, comentó Pablo. “La verdad es que es muy lindo que Rosario pueda tener un evento de este tipo, ojalá pueda haber otro. Porque te entusiasma aunque no conozcas los deportes”, aportó su novia Andrea.
El stand de la Municipalidad de Rosario nuevamente sumó en popularidad con sus máquinas de tatuajes 3D. Más de 1.000 personas, sobre todo niños y niñas, pasaron a lo largo del fin de semana para llevarse en la piel un motivo de los Juegos. El Guazú con bandera argentina y la antorcha olímpica fueron los favoritos. “Tatuarse es su sueño, así que imaginate la alegría que tiene”, dijo una mamá mientras su niño mostraba el brazo decorado. “Es muy divertido, algo original entre todo lo que se puede hacer acá”, agregó.
Sobre la tarde, cuando el handball ya terminaba su primera jornada, los espectadores se mudaron detrás del estadio rojo y de cara al río para presenciar la competencia de 10.000 metros de aguas abiertas. En la orilla, familiares y amigos de la rosarina Julia Arino alentaron el paso de la nadadora junto a decenas de personas que no dudaron en alentar a la local. “Nunca la podemos ver porque siempre compite afuera, así que ahora que está acá obvio que aprovechamos”, expresaron desde un grupo entusiasta que incluso llevó banderas. “Yo nunca había visto este deporte y realmente es emocionante ver competir a los argentinos”, aseguró una señora mientras se anoticiaba de las características del circuito.
La nadadora rosarina terminó quedándose con la medalla de plata, ante la ovación del estadio azul y toda la gente que se acercó a aplaudirla en la costa. “Estoy muy sorprendida para bien con toda la organización. Quiero agradecerle a los voluntarios, a todas las personas que hicieron esto posible. Este resultado es para mi familia, mis amigos y todo mi equipo de trabajo”, expresó emocionada Julia después de la ceremonia de premiación.
En Puerto Roldán, el esquí náutico tuvo su jornada final con la modalidad Overall, donde mide por la sumatoria de todos los puntos obtenidos en Salto, Figuras y Slalom. Otra vez, los hermanos rosarinos Tobías e Ignacio Giorgis se destacaron obteniendo las medallas de plata y bronce respectivamente. Tobías, el menor de los dos, con sólo 16 años estuvo cerca de arrebatarle el oro al chileno Rodrigo Miranda. Sin dudas, el deporte local tiene futuro en estas figuras.
La sede terminará sus actividades el lunes, con la competencia de wakeboard. Además, La Florida alojará las instancias clasificatorias del handball, que otra vez promete ser lo más convocante. También habrá modalidad relevos de aguas abiertas y el estreno de la sede de l laguna El Saco con vela.