Jóvenes del distrito Noroeste entregan kits lúdicos a adultos mayores y los asesoran sobre cómo cuidarse

Son participantes del Nueva Oportunidad y en lo que va del mes de julio distribuyeron más de 200 conjuntos de libros y juegos de mesa, junto a cajas de alimentos para los mayores de barrio Larrea.

Franco, Sunai y Micaela forman parte del grupo de 14 jóvenes del Nueva Oportunidad que se capacitaron durante 2019 en Animación de Eventos en el polideportivo Garzón y que colaboraron en diferentes actividades recreativas y deportivas durante el verano en el espacio municipal. Tienen entre 15 y 22 años y a partir de la pandemia se pusieron a pensar cómo podían ayudar a los adultos mayores de su barrio.

 

De esta manera, se fueron vinculando con distintas organizaciones y hoy participan activamente en la entrega de kits lúdicos y cajas de alimentos para los más grandes, con más de 200 entregas en lo que va de julio. Además, brindan asesoramiento a los adultos y adultas mayores sobre los cuidados a tener en cuenta para evitar la propagación del coronavirus.

 

«En este momento de pandemia la gente necesita más ayuda. Nosotros les explicamos que en el kit tienen juegos y libros para entretenerse y para que no estén tan pendientes de las noticias y se preocupen demasiado. Vemos que se ponen contentos de que los visitemos. También los asesoramos sobre cómo cuidarse y sobre las medidas de ditanciamiento», asegura Franco.

 

El joven se vinculó desde chico con el Centro de Convivencia Barrial Ludueña y participa desde hace unos años del Nueva Oportunidad; primero realizó el curso de Talabartería y después el curso de árbitro en el Garzón. Cuenta entusiasmado que se capacitó además como Promotor de Cuidados para Adultos Mayores también en el polideportivo municipal.

 

«Lo primero que se trató fue hablar con los adultos mayores. La idea es poder charlar sobre cómo se sienten. La semana pasada empezamos un curso de Promotores Comunitarios que se hace todos los viernes, sobre temas relacionados con los adultos mayores, las enfermedades y cómo prevenirlas, en ese curso estamos en éste momento», agrega Franco.

 

Por su parte, Sunai se sumó a participar en el Centro Comunitario La Tortuguita y con sus compañeros entregó los kits de juegos junto con las cajas de alimentos a los adultos mayores de barrio Larrea. La joven comenta que durante el año pasado hicieron el Curso de Animación de Eventos y durante el verano «colaboramos con los profes en las actividades de las colonias y de las actividades acuáticas del poli». En marzo ya se venían preparando para el cursado de este año, pero la pandemia modificó los planes, añade.

 

Cuando empezó la pandemia, dejaron de asistir al curso, por un lado porque se suspendieron las actividades y, por otro, porque el polideportivo municipal se convirtió en un Centro de Aislamiento. Sunai relata que «a pesar del aislamiento» siguieron comunicados entre los compañaeros por Whatsapp y vieron en esta actividad la posibilidad de «hacer algo para ayudar».

 

En tanto,  la experiencia de Micaela se vinculó a una beca que obtuvo en Aricana (Asociación Rosarina de Intercambio Cultural Argentino Norteamericano), en la que debía acompañar su formación brindando servicios comunitarios para adultos y adultas mayores. Fue así que comenzó a visitar distintos geriátricos, en los cuales además de acompañar a los residentes, la tarea consistía en hablarles en inglés. A partir del Nueva Oportunidad, se sumó a la entrega de los kits lúdicos y asume la tarea de explicar a «los adultos mayores qué contiene el kit y en qué consiste».

 

Damián Del Riego es uno de los coordinadores de los cursos del Nueva Oportunidad que se dictaban habitualmente en el polideportivo Garzón, y contó: «Nos pusimos a pensar qué podíamos hacer en éstos tiempos de pandemia. Acá estábamos con el Centro de Aislamiento y no podíamos hacer mucho y en esas charlas surgió  la idea de hacer unos kits para entregar a los adultos mayores y también para las familias. Dentro de los cuadernitos que entregamos para las familias, armamos un kit de juegos».

 

«Acá viene los sábados la Fundacion Fondo de Becas (FONBEC) que da de comer a niños del barrio, durante la pandemia la gente venía a buscar los alimentos pero no se podía ingresar porque había gente en el Centro de Aislamiento», indica Del Riego, y menciona: «Como arranque empezamos a entregar esos kits, ahí entregamos 100 kits. Después empezamos a hacer un listado con la profes de los adultos mayores que hacen actividades en el polideportivo, que la mayoría vive en la zona, y empezamos a entregarlos a domicilio».

 

«La semana que viene vamos a ir a un merendero y además estamos armando una bolsas con juguetes y juegos para que los chicos que van puedan hacer algo», adelanta Del Riego sobre alguna de las próximas actividades.

Cabe destacar que durante la etapa de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, los jóvenes confeccionaron a distancia una revista con más de 60 páginas de actividades para jugar en familia.

 

Trabajo colectivo y construcción de lazos sociales

Desde el municipio se articulan diferentes propuestas destinadas a los jóvenes y el Programa Nueva Oportunidad es una de ellas. La iniciativa les permite capacitarse y participar de espacios de intercambio y reflexión para que adquieran herramientas de inserción laboral y hábitos de convivencia social.

El programa convoca a jóvenes de entre 16 y 30 años que hayan dejado la escuela, no tengan empleo ni formación en oficios. Las capacitaciones se dictan en centros comunitarios, cooperativas, centros de Convivencia Barrial, centros de salud, polideportivos, clubes, vecinales, organizaciones sociales y políticas, centros productivos de la Municipalidad, escuelas técnicas y primarias nocturnas.