Algo en Común El diario de Rosario
Figuras humanas, castillos, barcos gigantes y mucha creatividad colectiva. De esa manera puede resumirse lo que fue una nueva edición, la 29°, del tradicional concurso de esculturas en la arena que este lunes reunió en el Balneario La Florida a decenas de participantes quienes, munidos de palas, baldes e imaginación, sembraron de arte la playa rosarina y disfrutaron de una hermosa mañana con todos los protocolos sanitarios correspondientes.
En esta oportunidad, se sumaron grupos de niñas, niños y adolescentes, de entre 12 y 15 años, que forman parte de la colonia de vacaciones de La Florida y participan de las actividades en los centros de Convivencia Barrial Travesía, Los Cedros e Industrial y del CIC Cerámica. También dijeron presente adultos del Hogar de Mayores ubicado en Grandoli 3460, quienes se acercaron al balneario acompañados por el coordinador y el equipo que trabaja en ese espacio.
“Estuvimos todo el año cerca de los vecinos y vecinas en los centros de convivencia barrial (CCB) y en la temporada sostuvimos la propuesta #VeranoEnLosCCB, que alojó a primera infancia, segunda infancia y jóvenes, con el objetivo de poder sumar a la población que participa de las actividades de verano de Desarrollo Humano, con las colonias municipales de la Secretaría de Deporte y Turismo y también con Cultura, que le pusieron su sello a la evaluación de las esculturas”, indicó Nicolás Gianelloni, secretario de Desarrollo Humano y Hábitat de la Municipalidad de Rosario.
En este sentido, el funcionario local trazó un balance del trabajo realizado en el territorio durante el verano. “En medio del contexto, la temporada fue muy exitosa respecto a la participación, estamos muy contentos de haber podido acompañar desde el Estado a los sectores que más lo necesitan”, evaluó.
Por su parte, Carla Fiorentini, directora de Deporte Comunitario de la Secretaría de Deporte y Turismo, puso de relieve la posibilidad de sostener las actividades de verano más allá de la pandemia. “Se planificó con mucha anticipación el verano y se trabajó en equipo para desarrollar todos los protocolos necesarios para cuidar a los vecinos y las vecinas. Fue fundamental poder sostener las actividades para que la gente se siga apropiando del espacio público, jugando y aprendiendo, en lo que para los más chicos fue la primera experiencia pedagógica después de varios meses”, profundizó.
Las ganadoras
Débora, Karen y la pequeña Nayla hicieron una mujer en pleno proceso de parto, con la que ganaron el primer premio de la competencia. “Somos de zona norte y practicamos kayak en la escuelita. Nos encantó la actividad”, relató el equipo familiar de escultoras. “La idea surgió porque tenemos una embarazada en la familia, que dentro de poco dará a luz”, agregaron.
Las creaciones de niñas, niños, jóvenes, adultos, adultos mayores y familias fueron observadas por los jurados que las evaluaron considerando el trabajo, la creatividad, el esfuerzo y la tarea en equipo.
Centros de Convivencia Barrial
Los centros de Convivencia Barrial municipales son el primer espacio público de vinculación para niños, niñas y familias, y conforman un lugar común y estatal donde se propician encuentros con lo otro, con lo diferente, con lo que es de todos. Son lugares de puesta en común y de conformación de redes.
Están ubicados estratégicamente en los barrios de mayor vulnerabilidad de la ciudad y allí se desarrollan instancias de capacitación, recreación, consultoría legal, de salud, entre otras. Y posibilitan la inclusión de grupos familiares completos propiciando el pleno ejercicio de sus derechos.
