Denuncian precariedad en el refugio municipal


Atento al reclamo de trabajadores del Hostal Municipal Abanderado Grandoli, sobre la situación de precariedad en la que se encuentran, el Concejo elevó un pedido de informes impulsado por la edila del Frente de Todos – PJ, Alejandra Gómez Sáenz, y acompañado por sus pares de bloque Norma López y Eduardo Toniolli.

“La mayoría tenemos 4 o 5 años trabajando en el lugar, que antes se conocía como Refugio Municipal Invernal, pero a partir de la pandemia todo cambió”, dice un laburante del espacio que prefiere mantenerse en el anonimato. “Al inicio de la pandemia nos convocaron a trabajar de corrido y con contratos muy precarizados, incluso estuvimos varios meses sin cobrar.  

En marzo de este año nos comunican que de los 9 contratados, 3 se iban a quedar afuera porque necesitaban esos lugares para gente de su partido. Nos dijeron que la única manera de mantener esas fuentes era ser contratados por una ONG, es decir, más tercerizados aún, porque ya figurábamos con contrato de locación, y que encima se vencen en septiembre”.

Entre los reclamos que surgen de los trabajadores del ahora Hostal Municipal, se destacan “cobrar los 4 meses que nos deben” y “tener un contrato digno de la propia Municipalidad”. “Después de años de trabajar, de hacernos cargo del espacio en plena pandemia y cuando nadie lo quería hacer, uno espera que el contrato mejore, no que empeore”, fustiga el trabajador, y argumenta: “Mientras todo el mundo se quedaba en su casa, nosotros fuimos a poner el cuerpo y estuvimos en la primera línea. Ahora que todo el mundo está vacunado, nos quieren dejar afuera del espacio”.

“Como acompañantes convivenciales, somos parte de un equipo interdisciplinario cuyo objetivo es que quienes pasen por el refugio, tengan salidas exitosas, puedan reconstruir vínculos familiares y laborales y reinsertarse en la sociedad”, se explaya el laburante consultado, y justifica: “De las 100 personas que pasaron en este tiempo, el 80 por ciento lograron egresos exitosos, esto indica que el dispositivo funciona. Estamos hablando de personas con consumo problemático, en pleno aislamiento obligatorio por pandemia y con abstinencia”. Y concluye: “En realidad, lo que nos corresponde es el pase a planta, porque somos trabajadores municipales más allá de que siempre nos ningunearon”.

Desde el bloque Frente de Todos – PJ, en tanto, coincidieron en remarcar que “lo más preocupante es la ausencia de políticas públicas que acompañen a los trabajadores”, porque más allá de la deuda de estos cuatro meses y la situación de precarización contractual, “la conformación del equipo de acompañamiento funcionó, exclusivamente, por la voluntad y el compromiso de los propios trabajadores y trabajadoras que se organizaron ante una situación inesperada como fue el aislamiento obligatorio en los primeros meses de pandemia”.