En la reunió la comisión de Planeamiento y Urbanismo del Concejo Municipal, se analizaron un proyecto de decreto de la edila María Fernanda Gigliani, que requiere información respecto a una propiedad de peatonal San Martín 1099, esquina San Juan.
La edila Gigliani recordó que “se había descatalogado –como preservación patrimonial- esa propiedad del área central” y también memoró que “la única causal para descatalogar es el estado de ruina” para lo cual marcó se requiere “todo un procedimiento con peritos, la Universidad”. Acotó que también puede ser “por necesidades de tipo urbanístico” y “el estado de ruina”.
Mencionó, posteriormente que se determinó “a partir de un incendio” y sostuvo “si eso es cierto cuál es la situación para que el comercio siga abierto al público”, bajo una situación de ruina.
Por su parte, el edil Agapito Blanco, de Juntos por el Cambio, indicó que “estoy de acuerdo con todo” el pedido de la concejala Gigliani, “menos el artículo 2º” que propicia que “en caso de no constatarse riesgo de derrumbe en el inmueble, deberá enviarse un mensaje a este cuerpo para la reincorporación del inmueble al Catálogo de Patrimonio”.
Mientras, que el edil Fiatti recordó, por su parte, que para la descatalogación “hubo un informe del Programa de Preservación del Patrimonio” y en el mismo se indicaba que “a consecuencia del incendio están destruídos todos los elementos de contenido patrimonial”.
Agregó que “si uno entra –al local- lo que se ve es un galpón, con ningún elemento de materialidad patrimonial, sí queda la fachada”. Remarcó “no había diagnóstico de ruina. Se había hecho inexistente lo que la norma de patrimonio puede proteger. Parece una utilería, sólo fachada”. Por último planteó, que sí se podría preguntar “qué hacer con las fachadas”.
A su turno, la edila Nadia Amalevi, de Arriba Rosario, consignó que podría consultarse “si corresponde preservar la fachada” y puso como ejemplo el caso del Banco de la Nación Argentina, en la esquina de las peatonales Córdoba y San Martín, “donde se preservó el arco pero el edificio es nuevo”. Luego mencionó que “el Catálogo se puede modificar”.
Reiteró la concejala Gigliani que en su momento “las áreas técnicas hicieron el Catálogo. No nos metimos a cuestionar eso” e insistió “el único causal es la ruina”.
En tanto, el concejal Juan Monteverde, de Ciudad Futura, consignó que “el Catálogo es nuevo”.
También aludió a la posibilidad de “modificar el Catálogo” el edil Manuel Sciutto, del bloque Socialista.
En una nueva intervención el concejal Fiatti insistió en su argumentación respecto a lo que señalaba el informe de Patrimonio, pero acotó que se puede preguntar “si merece algún tipo de discusión la fachada”. En tal sentido el edil Sciutto mencionó consultar “si se justifica mantener la fachada como patrimonio”.
Además, durante la reunión de la comisión de Planeamiento, se trataron expedientes, en relación al mensaje del Departamento Ejecutivo con el Plan de Detalle sobre Brassey y Tarragona, indicó el edil Fiatti que la ordenanza Nº 8.973, en su artículo 8, “es enunciativa sobre lo que debe remitirse al Concejo”.
Por su parte, la concejala Gigliani, planteó que “deben enviarse” , mientras que Fiatti sostuvo que “está casi todo enviado y un acta de adhesión voluntaria”. Sobre el estudio de impacto ambiental, debe presentarse “previo al permiso de obra”.
Finalmente, el mensaje quedó en análisis.
De los expedientes, tuvo despacho favorable, y remitido a la comisión de Gobierno, un mensaje del Ejecutivo municipal con una donación de terreno por parte de la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo (DPVyU), por un total de 1.429,74 metros cuadrados; de ellos 741,77 para la calle Gregorio Deán Funes y 687,97, para la calle Teniente Alfredo Agneta.
A su turno recibió despacho un mensaje del Departamento Ejecutivo, con relación a la viabilidad de articulación para un proyecto en 3 de Febrero 539.
Sobre el particular recordó la concejala Gigliani, que era el inmueble que pertenecía a la relojería “Sudamericana”, que cuando se retiraron el carrillón y relojes para ser destinados al Museo de la Ciudad, los ediles que concurrieron “no pudimos ingresar porque había peligro de derrumbe”.
Obtuvo despacho, una presentación de la firma Lugares SA, con un pedido de excepción para regularizar cochera en colectora Juan Pablo II de la avenida de Circunvalación 6750. Indicó la edila Gigliani la necesidad de “actualizar el precio base”.
Por su parte continuará en consideración un pedido de un particular, para ampliar un permiso de edificación en Dorrego 1113. Se precisó que originalmente era planta baja y 5 pisos, y se construyen planta baja y 8 pisos, pero, la modificación del Código lo permite. Los problemas son respecto a una escalera y a las dimensiones del patio.
Sobre el proyecto de la concejala Marisol Bracco, de Volver a Rosario, a quien acompañó su par de bancada, Hernán Calatayud y el edil Blanco, que determina que los natatorios públicos deberán contar con un dispositivo de parada de emergencia del sistema de filtrado y recirculación del agua, mencionó el edil Fiatti que la autora de la iniciativa está “haciendo consultas” con la Subsecretaría de Deportes municipal.
En tanto y sobre el proyecto de ordenanza del Departamento Ejecutivo que determina la protección ecológica y ambiental en el área del arroyo Ludueña y el Bosque de los Constituyentes el concejal Monteverde pidió que “venga al Concejo el plan de manejo, para tener un mínimo control. Por lo demás está correcto”.
Indicó el edil Fiatti que en la normativa “se prevé hacer un informe anual” que deber remitirse al Concejo.
También la edila Gigliani solicitó el envío del plan de manejo. La iniciativa seguirá en estudio.
De la reunión de la comisión de Planeamiento y Urbanismo tomaron parte su presidente, Fabrizio Fiatti, de Arriba Rosario, su par de bancada, Nadia Amalevi; María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular; Juan Monteverde, de Ciudad Futura; Manuel Sciutto, del bloque Socialista, y Agapito Blanco, de Juntos por el Cambio.