Apagón educativo: un paso más para el “adoctrinamiento de mercado”.
El gobierno ultraderechista de Javier Milei llevó a cabo un acto de autoritarismo más, censurando los contenidos educativos que estaban alojados en las plataformas digitales públicas, puestas a disposición de toda la docencia y a los estudiantes y de sus familias. Se trata una medida arbitraria y unilateral que da de baja las plataformas “educ.ar” y “conectar igualdad” con el supuesto argumento de “revisar los contenidos”.
Es totalmente inaceptable que quienes aún ni siquiera han nombrado autoridades para una Secretaría de Educación degradada en todos sus sentidos, ahora se arroguen la potestad de dar de baja o “suspender” un conjunto de materiales y recursos que fueron creados a lo largo de todo el período democrático caracterizado por la ampliación de derechos, la inclusión socioeducativa y la inclusión digital.
Tanto educ.ar como conectar igualdad son programas educativos que cuentan con sitios web en los que, tanto educadores como estudiantes, han podido recurrir todo este tiempo (especialmente en contexto de pandemia) a los efectos de indagar, conocer, descubrir e incluso comparar distintos tipos de saberes y conocimientos que se presentan en forma de contenidos, recursos para el aula, estrategias didácticas, etc.
Se trata de textos, videos, tutoriales diversos materiales que son utilizados para estudiar, preparar exámenes, diseñar clases Y lo más importante, estas plataformas estatales que se ofrecen de manera pública y gratuita, permiten dar una gran batalla en contra de los procesos globales de privatización de la educación y mercantilización del conocimiento.
Es muy llamativo que no habiendo aún ninguna definición de política educativa ni de planeamiento por parte del Estado Nacional, se tomen este tipo de medidas en las que hay evidentemente un gran prejuicio respecto a los procesos de construcción pedagógica que hemos sostenido en estos 40 años de democracia.
Nos preguntamos: ¿quién o quienes estar “revisando” estos contenidos?, ¿con qué propósito o sentido?, ¿con qué legitimidad? Y si lo que querían era “revisar”, ¿no lo podían haber hecho sin tomar la medida de suspender las plataformas en cuestión?
Evidentemente esta medida forma parte de todo el paquete del Gobierno que tiene como objetivo final la destrucción de la educación pública. Tuvieron el mismo proceder irrespetuoso de las instituciones democráticas con el DNU y la Ley ómnibus, declarando a la educación como un “servicio”, vulnerando nuestro derecho a la protesta social, definiendo medidas que solo están dirigidas a evaluar desde la perspectiva del control y el disciplinamiento; incorporando, además, a la educación a distancia desde los primeros años de la escuela primaria.
Frente a la gran resistencia, luego “retocaron” algunos artículos, pero para empeorar la situación. Con respecto a la educación a distancia corrieron unos años pero dejaron abierta la posibilidad de la educación híbrida con el impulso de la educación desde los hogares (homeschooling).
Esto está directamente relacionado con la suspensión de las plataformas educativas estatales, porque lo que tienen en mente es promover la injerencia de las plataformas de las grandes corporaciones del sector privado que existen a escala mundial-global y que hacen de la educación un negocio más y un instrumento para la imposición de los valores del mercado. Construidas desde las lógicas del sector privados, estas plataformas producen “enlatados” y ponen a disposición del “público-consumidor” una serie de recursos propios de lo que en la actualidad se ha dado en llamar el capitalismo de plataformas.