Fuerza del Oeste y Sentires son las dos flamantes entidades conformadas por jóvenes que se capacitaron como promotoras y promotores de cuidados y generaron una salida laboral colectiva.
Grupos de jóvenes que se capacitaron en el marco del programa Rosario cuida a sus barrios conformaron legalmente, con el acompañamiento del Municipio, dos cooperativas para ofrecer a vecinas y vecinos de la ciudad servicios de cuidado integral de adultas y adultos mayores e infancias, generando así una salida laboral colectiva.
La iniciativa surge a partir de los ciclos de formación en cuidados para jóvenes, que se dictaron en 2020 y continuarán a lo largo de este año, en coordinación con Nueva Oportunidad. En esta segunda etapa, algunas grupalidades se sumaron a la propuesta de extender estos encuentros y comenzar a organizarse de manera de encarar la tarea como una posible fuente de trabajo.
Así, con la colaboración de la Dirección de Cooperativas y Mutuales de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat, crearon la Cooperativa de Cuidados Fuerza del Oeste, integrada por las organizaciones sociales La Hormiga y el Centro Cultural La Trinchera, con acciones territoriales en barrios del distrito Oeste; y su par Sentires, constituida por jóvenes nucleados en la ONG Cedeifam (Centro de desarrollo integral para la familia y la mujer), que desarrolla sus actividades en barrio La Esperanza del distrito Norte.
Al respecto, el secretario de Desarrollo Humano y Hábitat, Nicolás Gianelloni, sostuvo que «en los espacios de capacitación que se ofrecen desde el Estado se promueve el cooperativismo y mutualismo como forma de encontrar respuestas a un problema que está presente en todas las comunidades, que es el trabajo», y agregó: «Creemos que la nueva economía es social y solidaria, y apostamos a la importancia de que los jóvenes que ingresan al mundo laboral lo hagan con estos valores».
“La apuesta de la creación de las cooperativas no tiene que ver con una formalidad, sino que hay un proceso de compañeras que transitaron espacios de capacitación dirigidos a poder reconocer la salud, el medioambiente y el lugar del otro, para poder formarse sobre lo que implica un cuidado individual, singular, pero también colectivo”, sostuvo, por su parte, Luciano Vigoni, director del programa Nueva Oportunidad.
Asimismo, Vigoni calificó al proceso como “una experiencia sumamente vanguardista, innovadora, que intenta el reconocimiento de un saber que en definitiva traen muchas de las pibas o las organizaciones con las que trabajamos y que tiene que ver con la construcción de un nuevo enfoque a partir de un encuentro entre las organizaciones, el Estado y la Dirección de Cooperativas que le da la formalidad”.
Un servicio clave en el nuevo contexto
“En la formación de nuestra cooperativa tuvimos muy buenas experiencias con el curso de cuidados; los capacitadores nos brindaron muchísimas herramientas y los encuentros fueron muy constructivos y amenos”, indicó Telma Addelgamit, integrante del Centro Cultural La Trinchera, que forma parte de la flamante cooperativa Fuerza del Oeste.
En el mismo sentido, su compañera de cooperativa, Angie Carranza, que integra la organización La Hormiga, consideró: “Es muy importante la conformación de la cooperativa porque nos enfrentamos a un nuevo contexto en el que tenemos que estar acompañando y cuidando a las infancias, adultos mayores y disidencias con una mirada respetuosa de sus derechos”.
Sobre su experiencia, Fiama Monzón, integrante de Cedefaim y estudiante de Trabajo Social, señaló: “Me gustó mucho participar en campañas como la de prevención de VIH, en la que anotamos a las personas y las ayudamos a guiarse sobre por qué era importante vacunarse o llevar un control de PAP diario”.
En la misma línea, Rafaela Coria del CC La Trinchera, reflexionó sobre “lo importante que es acompañar a la mujer desde el embarazo, al amamantar a su bebé y, sobre todo, el tiempo que le podemos dedicar a jugar con ellos aunque no tengamos grandes juguetes”.
Promotoras y promotores de cuidados
Los integrantes de las cooperativas formaron parte del ciclo Promotoras y promotores de cuidados, que se dictó a más de 20 grupos de jóvenes de toda la ciudad en coordinación con Nueva Oportunidad.
De esta manera, más de 200 participantes se capacitaron para llevar adelante acciones de prevención en su comunidad sobre Covid-19 y dengue, abordaje integral de cuidados para adultas y adultos mayores, violencia de género y diversidad, derechos humanos y violencia institucional, e infancias y crianza respetuosa. Además, 20 de ellos realizaron el curso de Auxiliar en Cuidados Gerontológicos que ofrece la Escuela Municipal de Gerontología.
La propuesta fue generada en el marco de Rosario Cuida sus Barrios y fue articulada con la Subsecretaría de Desarrollo Humano, la Dirección General de Nueva Oportunidad, la Dirección de Adultas y Adultos Mayores, la Escuela Municipal de Gerontología, la Dirección de Políticas de Cuidados, y la Secretaría de Género y Derechos Humanos.