El Ministerio de Justicia y Seguridad, a cargo de Pablo Cococcioni ordenó el vaciamiento de varias comisarías de Rosario y trasladaron un total de 86 presos a dependencias del Servicio Penitenciario.
De esta manera el personal policial ya no tendrá la tarea de custodiar presos y se dedicará exclusivamente a los patrullajes de prevención. En los próximos días se realizará lo mismo en la ciudad de Santa Fe, y luego se continuará con el resto de las comisarías de la Provincia.
Por otra parte, Coccocioni detalló otras medidas que se están llevando adelante en todos los edificios que alojan detenidos y en la calle. “Estamos desarrollando operativos de cacheo, control y requisas aleatorias en la vía pública; prohibición de entrada de elementos al servicio penitenciario, restricción de horarios de visitas, horarios de patios y comunicaciones y otros derechos reglamentarios de los reclusos”. Y remarcó: “Vamos a adoptar todas las medidas necesarias, y de la forma más enérgica posible, para garantizar y recobrar la paz pública en Rosario y en toda la provincia de Santa Fe”.
Mayor presencia y patrullaje
Desde el primer día de gestión, también se dispuso un bloqueo administrativo de la Policía provincial. “Esto significa que sólo funcionará con guardias mínimas en las oficinas y nos permite contar con mayor presencia policial en las calles y el territorio”, marcó Coccocioni. La consigna general es que hasta el último policía esté en la calle, haciendo patrullaje preventivo, y no en oficina juntando papeles”.
Además, el Ministro sostuvo que “a una semana de estar en el Gobierno, podemos decir que hoy las rutinas de patrullaje cuentan, como mínimo, con el doble de vehículos en calle por efecto de estas medidas que estamos tomando. Avanzaremos a paso firme en función de la planificación establecida por el gobernador Pullaro para reequipar la institución policial que tiene una flota de vehículos absolutamente desmantelada.
Esta semana ingresamos con talleres móviles en las unidades regionales y nos encontramos con unidades en estado calamitoso. Esto no puede volver a pasar nunca más en la provincia de Santa Fe. Recibimos una policía colapsada que iremos reconstruyendo en el corto, mediano y largo plazo, apuntando, entre otras cosas, a que la flota de patrulleros esté en condiciones”, completó.