Puerto Madryn.
La Cámara Penal de Puerto Madryn confirmó la prisión perpetua para un hombre condenado por matar a su hija de 6 años,a golpes y con cortes en el cuello, con el argumento de que la niña tenía un problema de salud mental, un hecho ocurrido en abril de 2019 en una vivienda de esa ciudad chubutense, informaron hoy fuentes judiciales.
En una audiencia que se llevó a cabo ayer, la Cámara rechazó todos los planteos de la defensa de Manuel Ávila (43), condenado por el crimen de Martina (6).
La fiscalía de Puerto Madryn informó que el fallo fue a dado a conocer por los camaristas Rafael Lucchelli, Flavia Trincheri y Leonardo Pitcovsky, quienes dejaron firme la pena de prisión perpetua para el condenado.
Por su parte, el defensor Diego Trad había solicitado que la Cámara Penal hiciera lugar a la aplicación de circunstancias extraordinarias de atenuación, para que la pena a cumplir fuera de entre 8 y 25 años de prisión, al tiempo que pidió que se declare inconstitucional la prisión perpetua impuesta en septiembre del año pasado.
En aquella oportunidad, Ávila fue hallado culpable del delito de «homicidio agravado por el vínculo» en perjuicio de su hija Martina, hecho que él mismo confesó.
«No hay otra condena posible para semejante crimen», consideró el fiscal Daniel Báez, quien junto a su colega Alex Williams llevó adelante la acusación.
Los fiscales dijeron que «no hubo ningún atenuante» al pedir la pena única de prisión perpetua y descartar la hipótesis del defensor Tras, quien alegó emoción violenta como un atenuante del delito.
De acuerdo a la investigación fiscal, al momento de ser hallada muerta en su casa de Puerto Madryn, «la menor tenía entre 23 y 24 lesiones por golpes, fractura de cráneo y un corte profundo en el cuello».
«Al procesamiento de las pruebas, y luego de la confesión, no han quedado dudas, el veredicto debe ser de culpabilidad», dijo el fiscal Williams y agregó: «Martina Ávila perdió la vida a manos de la agresión de su padre.»
En tanto, la defensa del acusado, a cargo de Trad, sostuvo que fueron «circunstancias extraordinarias» de atenuación y que «la mató para evitar el sufrimiento de la niña».
El hecho ocurrió el 13 de abril de 2019 en Puerto Madryn, cuando una niña de 6 años que tenía retraso mental fue asesinada a puñaladas, y por el crimen detuvieron a su padre, quien confesó haberlo cometido.
Según las fuentes, los efectivos de la seccional local recibieron «un llamado de vecinos» que alertaron sobre la presencia en esas calles «de un hombre en la vía pública gritando, con un cuchillo y ensangrentado».
«Cuando la policía llegó al lugar detuvo al hombre y concurrió a la vivienda donde fue encontrado el cuerpo de una menor ya fallecida», explicó el jefe policial.
Por su parte, Ávila presentaba una herida de arma blanca en el pecho que él mismo se produjo en un aparente intento de suicidio.
«Yo quise quitarme la vida, que nos vayamos los dos… Me quise quitar la vida, pero no tuve la suerte», declaró el hombre en el juicio oral.