En medio de los múltiples hechos de inseguridad y violencia, el diputado provincial Gabriel Chumpitaz propone la intervención de grupos comandos especializados para pacificar las ciudades de Rosario y Santa Fe.
“Este momento crítico tiene que ser contrarrestado con una fuerte decisión política y una acción contundente para enfrentar el crimen organizado que azota y destruye la convivencia pacífica”, afirmó Chumpitaz.
El diputado de Juntos por el cambio, integrante de la Comisión de Seguridad de la Cámara baja provincial, sostuvo que “no hay que ser contemplativos con la delincuencia que se lleva la vida de los santafesinos”.
“El poder de intervención territorial en seguridad por parte del Estado debe ser implacable, por eso es necesario este escuadrón urbano que estaría integrado por una combinación de los grupos élites, Alacrán de Gendarmería Nacional, el grupo Albatros de la Prefectura Naval, el GEOF de la Policía Federal y las TOE, Tropa de Operaciones Especiales de Santa Fe”, detalló el legislador.
La iniciativa del diputado macrista es complementada con la idea de apoyo logístico y de equipamiento por parte de las Fuerzas Armadas y del Ministerio de Defensa de la Nación, siguiendo el modelo exitoso y efectivo que condujo la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
“En Rosario y Santa Fe, desde hace muchos años se vive una guerra urbana derivada de los circuitos de violencia y aparatos narcocriminales que día tras día generan mayor terror en la ciudadanía. Es por ello que se necesita una intervención verdadera de alto impacto en términos policiales, más allá del abordaje de los otros ejes de la seguridad como el judicial, el penitenciario y el social”, consideró el legislador.
Por último, Chumpitaz aseguró que “Rosario necesita gastar menos en la GUM y empezar a salvar vidas aportando a un sistema integral con grupos entrenados con alta capacidad para enfrentar la narcocriminalidad” y, en ese sentido, concluyó: “Este modelo de escuadrón de fuerzas especiales urbanas ya fue implementado en otras ciudades de Latinoamérica como Medellín, y otros centros con densidad urbana y problemáticas de magnitudes similares a las nuestras, por eso es momento de dejar de echar culpas a la institución policial y atacar a la delincuencia de forma concreta en los territorios más calientes de la provincia”.