Caso Alvarado. Guantes Blancos


Por Carlos del Frade.

El lunes 16 de mayo de 2022 comenzó la semana número 12 del juicio a Esteban Alvarado.

El imputado por asesinatos, asociación ilícita, lavado de dinero y activos y narcotráfico, entonces, decidió hablar. Era la fecha del inicio de los alegatos de la defensa.

Ya había hablado antes, en el juicio y por Radio 2. No podía resistir la tentación ni tampoco dejar pasar la oportunidad de defender a dos referentes de la política provincial, Alejandra Rodenas y Armando Traferri.

Uno de los abogados defensores de Alvarado es Lucas Peirone. Había trabajado en el Ministerio de Seguridad en los tiempos de Maximiliano Pullaro, en el gobierno de Miguel Lifchitz y en diciembre de 2018, junto a su socio José Alcácer, defendieron a Luis Paz, otro empresario narco de la provincia.

Peirone puso mucho énfasis en sostener que no se probó ninguno de los cinco delitos por los que fue acusado Alvarado ni tampoco que tuviera capacidad de influir sobre otras personas.

Agregó que los fiscales quisieron direccionar las declaraciones contra los ya mencionados Rodenas y Traferri por su vínculo con el comisario Spoletti.

Ambas presentaciones parecían despreciar la suerte individual de Alvarado. Estuvieron centradas en las figuras de la actual vicegobernadora y en el senador. Las acusaciones del juicio fueron subordinadas frente a lo que sería dejar claro y no tenía cercanía con la vida del “Esteban”.

-…Los fiscales me pintaron como un monstruo…En mi jerga, los fiscales aplicaron mafia con papeles…Quiero que quede claro cómo son las cosas. Que cuando vayan a resolver sean justos y se basen en las pruebas.

Que no se dejen llevar por la presión mediática, ni política, ni por la presión que meten los fiscales…Nunca fui un seco, un NN, mi error fue nunca declarar nada…Esta causa es para tirarle mierda a (el senador, Armando) Traferri, a (la vicegobernadora, Alejandra) Rodenas, a un abogado. ¿Qué tienen que ver Rodenas y Traferri en esta causa? Si yo declaraba contra Traferri hubiera firmado un abreviado y capaz que en ocho años me iba a mi casa.

Pero como no me presté al juego de la Fiscalía acá estoy declarando y siendo condenado…Esto tiene un mensaje: es como decirle a ustedes ojo con lo que van a hacer con Alvarado, porque si lo condenan mal vamos a ir contra ustedes…Este juicio no es lo que decían.

Ellos estuvieron más tiempo con micrófonos afuera que lo que fue la causa acá adentro. Acá no aportaron nada…Yo, Esteban Alvarado, sé que no hice nada. Ni homicidio, ni asociación ilícita ni nada por el estilo. Hablan de narcotráfico y no estoy ni condenado por narcotráfico, estoy recién siendo investigado. Igual, si me condenan, apelaré hasta las últimas consecuencias…- dijo Alvarado por zoom.

¿La gente vinculada a la doctora Rodenas y al senador Traferri realmente cree que estas defensas les vienen bien a los dirigentes mencionados?.

El juicio a Alvarado en la justicia provincial ya entró en su epílogo.

Pero no es poca cosa todo aquello que aparecieron en las doce semanas de audiencias.

Hay bloques de la historia reciente de la provincia que merecen explicarse desde la política.
Uno de ellos es el que se abrió cuando Hugo Tognolli dejó de ser el jefe de la Policía de Santa Fe al revelarse sus conexiones con bandas del sur. Su reemplazante fue el comisario Cristian Sola, uno de los señalados como favorecedores de Alvarado.

En aquellos días agitados del gobierno de Antonio Bonfatti surgió la idea de crear la Secretaría de Delitos Complejos a cargo de Ana Viglione, denunciada ya en el juicio a Los Monos y una vez más en este proceso.

Ese bloque histórico termina en el terrible año 2013: asesinato del Pájaro Cantero, atentado contra Bonfatti, asesinato de Luis Medina y Justina Pérez Castelli y 264 homicidios en el departamento Rosario.

En aquellas tremendas horas, la doctora Alejandra Rodenas era jueza penal.

El otro bloque histórico es el iniciado en 2019 con el cambio de gobierno y la implosión institucional santafesina con denuncias cruzadas, fiscales presos y perseguidos, ministros echados y crecimiento feroz del negocio de la violencia urbana.

El juicio a Alvarado está más allá de la suerte individual del imputado.

Es un proceso histórico que empieza a buscar las complicidades en guantes blancos que todavía siguen impunes.

Esa explicación no vendrá de la justicia.

Será una difícil pero imprescindible construcción de la política.

Fuentes: Audiencia del lunes 16 de mayo de 2022, donde estuvo presente el autor de esta nota; Proyecto de Comunicación 35.986 del 13 de diciembre de 2018, elaborado por el autor de esta nota pidiendo explicaciones sobre la participación del doctor Peirone, en aquella oportunidad asesor de la Secretaría de Control del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Santa Fe, al cual accedió a través del decreto 2839 del 3 de septiembre de 2015.