Antonio Bonfatti, precandidato a diputado provincial por Acuerdo Progresista -del Frente Unidos para Cambiar Santa Fe- destacó que el acceso al suelo y la vivienda propia es una de las cuestiones fundamentales que el Estado debe resolver en favor de los sectores populares.
En ese contexto, sostuvo que la Provincia debe ser un actor clave en el diseño y desarrollo de un programa que comience a saldar esa deuda social.
“Claro que esto es posible, nosotros lo hicimos exitosamente durante nuestro gobierno, cuando desarrollamos el programa Mi Tierra Mi Casa. Desde la Legislatura impulsaremos la sanción de una ley para que ese programa pueda sostenerse en el tiempo en todas las ciudades y pueblos de la provincia”, explicó.
Mi Tierra Mi Casa fue uno de los pilares de la Gobernación de Antonio Bonfatti: “Este es otro plan que Perotti desmanteló, a pesar de los resultados positivos que estaba teniendo, como por ejemplo, entre tantos otros lugares, en el Parque Habitacional Ibarlucea”, apuntó el ex gobernador. El precandidato, formuló estas y otras declaraciones a la prensa durante una recorrida por el centro y sur de la provincia, de cara a las elecciones primarias que se realizarán en julio próximo.
MI Tierra Mi Casa fue un programa estratégico para promover el acceso a suelo urbanizado y vivienda. Según su esquema, el primer paso lo daba la Secretaría de Estado del Hábitat al identificar suelo vacante en las cinco regiones del territorio provincial -muchas veces de propiedad comunal o municipal- y realizar allí obras de infraestructura necesarias para su urbanización; esos lotes, ya con servicios básicos, se ponían luego a disposición a través de un sorteo para que fuesen adquiridos por beneficiarios, a valores muy por debajo de los indicadores de mercado. Con el lote en posesión, la construcción de las viviendas quedaba en manos de sus propietarios. Éstos podían optar por llevar adelante un proyecto independiente (sin financiamiento alguno) o bien seguir un esquema oficial diseñado por la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo.
Hacia 2015, el Estado santafesino ya contaba con 12 mil parcelas para urbanizar y se proponía, en aquel entonces, duplicar esa cifra, convocando a propietarios privados dispuestos a vender tierras y asociarse en un esquema de articulación público-privada.
Mi Tierra Mi Casa fue desarrollado entre 2012 y 2019 y buscó así ampliar el abanico estatal de soluciones habitacionales, urbanizando con infraestructura y servicios básicos, en esquemas de gestión asociada, suelo de propiedad comunal, municipal, provincial o de tenedores privados para su posterior venta a sectores sociales de ingresos medios y medio-bajos. Estas operatorias urbanísticas ampliaron y facilitaron oportunidades de acceso a la vivienda, hoy ausentes en Santa Fe. “El acceso al suelo urbanizado sigue siendo hoy la dificultad más grande para resolver el tema de la vivienda propia y el Estado santafesino debe poner en marcha nuevamente un programa estratégico para reducir esa brecha de desigualdad social”, subrayó ahora Bonfatti.