Se trata de cinco jornadas donde se busca dotar de herramientas a los más de 40 voluntarios para trabajar en el territorio y concientizar sobre los riesgos de tener armas en sus viviendas.
Comenzó la capacitación para las 43 personas encargadas de poner en marcha el desarme civil en la ciudad de Rosario. La semana próxima será el turno de la ciudad de Santa Fe. El curso, que consta de cinco encuentros, es llevado adelante por integrantes del Ministerio de Seguridad provincial, encabezado por Maximiliano Pullaro, y referentes de la ANMAC.
Ángel Ruani, Secretario de Seguridad Comunitaria del Ministerio de Seguridad de Santa Fe, señaló que “se empezó a trabajar con los multiplicadores con respecto a la información y de las políticas para mejorar la convivencia y disminuir la violencia en los barrios”. Con respecto a la campaña recordó que “es la tercera vez que lo hacemos y es una política de estado impulsada por el ministro Pullaro e instalada por el Ministerio de Seguridad y el Gobierno de Santa Fe con las autoridades nacionales”.
Por su parte, Pablo Suárez, director de Prevención y Seguridad Comunitaria, puso énfasis en señalar que para un barrio “que sus vecinos hagan la entrega de sus armas significa que van a poder tener un proceso de convivencia mejor” ya que “estaríamos corriendo una herramienta que pone en peligro a los miembros del grupo familiar y van a poder tener una convivencia mucho más pacifica para criar a sus hijos, a sus nietos, y garantizar que puedan acceder a los espacios públicos que existen en los territorios”.
Con respecto a la función de los multiplicadores, Suarez explicó que el de ellos “va a ser hacer la replica de lo aprendido en las capacitaciones con una incidencia directa de cada uno en su lugar de trabajo con sus compañeros, en los barrios aquellos que son referentes institucionales de organizaciones de la sociedad civil de tal manera de ampliar la campaña de desarme a toda la población de rosario y gran rosario”.
Las jornadas consisten en dotar a los multiplicadores de herramientas para concientizar a los ciudadanos de los distintos barrios de la ciudad sobre los riesgos que implica tener un arma en casa. Además en el transcurso de las cinco jornadas se los capacita en temas referentes a la legislación vigente, a los mitos sobre la tenencia de armas y como eso afecta al núcleo familiar.
Para aquellos que hagan entrega de sus armas, el programa prevé la entrega de un incentivo económico que llega hasta los $3000 pesos.