El aumento de controles de remises y taxis arrojó cifras récord de remisiones

En lo que va del año, la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana trasladó al corralón 345 remises ilegales, cantidad que supera las unidades sancionadas durante 2017 y 2016. En estos 6 primeros meses se remitieron 165 taxis, 64 de ellos en la zona de la terminal de ómnibus. La suba está vinculada a una política de gestión municipal cuyo eje es promover el cumplimiento de las normas como una forma de construcción de convivencia.

El fortalecimiento de los controles sobre remises y taxis arrojó en este primer semestre del año cifras récord de remisiones vehiculares al corralón. La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana confirmó resultados que superan ampliamente los números obtenidos en los últimos tres años, lo cual implica un avance importante en la promoción de condiciones más seguras en el tránsito, objetivo trazado por la Municipalidad de Rosario.

El secretario de Control y Convivencia Ciudadana, Guillermo Turrin, indicó que entre enero y julio de 2018, 345 remises fueron remitidos al depósito municipal. “Se trata de una cifra récord teniendo en cuenta que es semestral y está muy por encima de los resultados anuales obtenidos en los últimos tres años”, señaló. En ese sentido, precisó que en 2015 se remitieron 138 remises, en 2016 108 vehículos y en 2017 fueron 267. De acuerdo a lo que explicó, el incremento de traslados está relacionado a una intensificación de las acciones preventivas y de control tendientes a garantizar la seguridad vial y la convivencia urbana.

Los procedimientos se llevan adelante diariamente en distintos horarios y se concentran en las zonas urbanas más frecuentadas, como por ejemplo, la Terminal de Ómnibus Mariano Moreno, los shoppings, hospitales y casino. Los agentes de la Dirección General de Fiscalización del Transporte, con la colaboración de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe, piden la detención de los vehículos, se les exige a los conductores la documentación obligatoria para circular y en este marco es cuando se detecta si la unidad está funcionando como coche de alquiler ilegal. Otro dato concluyente es la existencia de un pasajero a quien se le pregunta por su presencia en el auto y qué vínculo tiene con el conductor. En este punto se logra determinar, en general, que se está frente a un traslado no reglamentario.

Mientras que al pasajero se lo invita a seguir viaje en un taxi legal, cuyo costo es absorbido por las cámaras de titulares de taxis de Rosario, el chofer debe abandonar el remise «trucho» que es acarreado. Por su parte, el personal actuante secuestra elementos que prueben la actividad ilícita, como por ejemplo, equipos de comunicación o planillas de servicios y tarifas.

Un aspecto a tener en cuenta en lo que respecta a los operativos es que son muchos los casos en que el conductor se niega a someterse a las fiscalizaciones por lo que debe intervenir la Policía para desarrollar el cacheo del coche. Finalmente, es el Tribunal de Faltas el que dispondrá, posteriormente,  las sanciones económicas tanto para el conductor como para el titular de la unidad. Además de las intervenciones en la vía pública, algunas remisiones surgen de denuncias efectuadas por ciudadanos al Sistema Único de Atención Ciudadana (SUA).

Turrin, en tanto, hizo hincapié en los riesgos que implica trasladarse en este tipo de vehículos ilegales: “Son unidades sin habilitación, es decir, no cuentan con controles técnicos ni cobertura de seguro. Tampoco sus choferes están registrados», advirtió.

Además de los controles a remises, la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana concreta fiscalizaciones a taxis. Según registros oficiales, durante el primer semestre de 2018 se remitieron 165 unidades por diversas irregularidades, 45 de las mismas se sucedieron en el mes de junio. Cabe mencionar que 72 de esas unidades fueron sancionadas en las inmediaciones de la Terminal de Ómnibus de Rosario Mariano Moreno – en las calles Cafferatta, Santa Fe, San Nicolás, Constitución y Córdoba-. Estos resultados cobran especial importancia en el marco de algunos conflictos desatados entre los taxistas que trabajan en el lugar.

Turrin remarcó que en la misma zona, en el mes de junio, se remitieron 40 remises que operaban clandestinamente, siendo la mitad del total de traslados registrados en ese mes en lo referente a este tipo de transporte público.

“En el último mes dispusimos en el lugar una veintena de agentes en distintos turnos a lo largo de toda la jornada a fin de prevenir y promover condiciones de seguridad en el espacio público teniendo en cuenta los lamentables episodios violentos ocurridos entre algunos taxistas”, observó.

De acuerdo a datos oficiales, las causas  de las remisiones fueron las irregularidades detectadas entorno a los documentos obligatorios -ya sea carné de conducción, seguro al día, declaración jurada, habilitación a través de la llamada tarjeta rosa, inspección técnica y desinfección al día- y elementos de seguridad reglamentarios para circular.

Turrin consideró que la suba de remisiones ilegales es el resultado de la puesta en marcha de una política de gestión cuyo sentido es el cumplimiento de las normas como modo de construcción de convivencia. Pero además, se concentran en la prevención: “Nuestra presencia en las calles nos permiten detectar situaciones irregulares y por ello riesgosas no sólo para el pasajero sino también para el chófer y el resto de los actores del tránsito», manifestó y subrayó: “Un vehículo por fuera de la norma es un vehículo peligroso”.

Por último, cabe destacar que la Municipalidad de Rosario cuenta con un lista de empresas de remises y taxis legales que puede consultarse https://www.rosario.gov.ar/web/servicios/movilidad/transportes/taxis-y-remises/empresas-habilitadas-de-taxis-y-remises).