Una de las primeras medidas del gobierno, concretada a pocos días de la asunción presidencial, fue la suspensión de la movilidad, los gobiernos de cualquier signo no abandonan la idea de invalidación de toda relación de las Jubilaciones, con los ingresos de los trabajadores en actividad (salario diferido) y consolida una pérdida importante con el correr de los meses y una desvalorización cada vez mayor, a las de por sí miserables ingresos Jubilatorios.
La fórmula anterior que rechazamos enérgicamente, basada en la inflación y en la variación salarial, para el acumulado de marzo 2020 y junio 2020, hubiese arrojado un 23%, que era “compensatorio” de la inflación del último semestre del año pasado, es decir que sobre la inflación de este semestre de 2020, que concluirá a fin de junio, la reparación sobre la inflación ha sido CERO.- Contra el relato “nacional y popular” de que nos están dando más “aumento” que la inflación.
La razón de estas medidas, son las exigencias de banqueros y del FMI, el ajuste viene marchando y los jubilados otra vez, somos los principales damnificados de ese ajuste. El gobierno se considera con licencia y derechos para meter la mano en los fondos
Jubilatorios (ANSeS) para rescatar y subsidiar a patronales y capitalistas, mientras ignoran el derecho adquirido, de la ley 27.426 y suspenden nuevamente la movilidad hasta el 31 de diciembre de 2020.
Es notable la connivencia de algunas direcciones sindicales, cuyas intromisiones son relativas a apoyar la política del gobierno en las negociaciones de la deuda con el FMI, que incluyen Rebajas de Sueldos de los Trabajadores, más Ajustes a los Jubilados, o para
requerir protección a las patronales. Lo cual se refleja con contundencia en el régimen previsional, originando un vaciamiento del sistema, que lo coloca a orillas del abismo.
Estamos hartos de tanta hipocresía de los gobiernos, estamos hartos de la indiferencia de las organizaciones gremiales – Los trabajadores activos sindicalizados, son los futuros PENSIONADOS, esa y no otra será la categoría que tendrán, si YA, HOY, AHORA no reaccionan en defensa de su futuro, queremos que sepan los riesgos que corren y sentimos la obligación de anticipárselos y también es bueno reconocer la parte que nos corresponde, no es posible que a esta altura de nuestras vidas nos anestesien con espejitos de colores (bonos miserables, bolsones, subsidios, viajes, fiestitas para la tercera edad, actividades lúdicas, “remedios sin cargo”, ítem estos, que nunca llegan a todos) para adormecernos y extirparnos, el ingreso digno que los Jubilados y Pensionados merecemos.
Que no nos confundan, nadie nos regala nada, todo se hace con los aportes a la Obra Social, que hacen los Trabajadores Activos y los Trabajadores Jubilados. Para alcanzar el objetivo que nos proponemos y defender lo que por derecho nos corresponde, hay que involucrarse fuertemente y transitar en Unidad de Acción, el camino que nos conduzca a esa meta.