Algo en Común El diario de Rosario
El primer y antiguo jefe de la narcobanda rosarina «Los Monos», Ariel Máximo «El Viejo» Cantero, accedió al beneficio de salidas transitorias tras cumplir cinco años de prisión por una condena por asociación ilícita, informaron fuentes judiciales.
«El Viejo» Cantero (56), había sido sentenciado a seis años de cárcel y ahora la jueza de Ejecución Penal, Luciana Prunotto, le concedió salidas de dos horas diarias aunque el beneficio no se hará efectivo porque están suspendidos los egresos temporales de las unidades penales por la pandemia de coronavirus.
Según se resolvió durante una audiencia realizada el jueves en el Centro de Justicia Penal de Rosario, la conducta de Cantero se evaluará luego de tres salidas para establecer su continuidad.
El defensor de «El Viejo» Cantero solicitó las salidas transitorias luego de que el antiguo jefe de «Los Monos» cumplió en prisión cinco de los seis años de la condena que le fijaron en abril de 2018 como miembro de una asociación ilícita comandada por su hijo homónimo, apodado «Guille». 911 on line.
El primer jefe de la violenta banda criminal está detenido desde mayo de 2015 cuando fue arrestado mientras conducía un carro tirado con caballos en la zona sudoeste de Rosario, tras mantenerse dos años prófugo de la Justicia.
Cantero accedió al beneficio denominado «estímulo educativo» luego de terminar sus estudios primarios en la cárcel santafesina de Piñero, donde cumple la condena.
Si bien las salidas transitorias son de dos horas, a ese plazo se le agregará el tiempo que le insuma el traslado desde la prisión, ubicada en el Gran Rosario, hasta el domicilio que propuso su defensa.
También deberá abstenerse durante las salidas de usar estupefacientes o tomar bebidas alcohólicas así como acercarse a las víctimas de los hechos por los que fue condenado, señaló la resolución judicial.
En el juicio oral a «Los Monos» que condenó a 19 personas –entre civiles y policías- como miembros de la organización, «El Viejo» Cantero no tuvo un rol destacado.
Para el momento de los hechos que allí se analizaron, la mayoría hasta el año 2013, Cantero se había separado de su antigua esposa, Celestina Contrera –luego condenada por narcotráfico- y había formado una nueva familia.
El tribunal lo sentenció a seis años de prisión por formar parte de la asociación ilícita liderada por su hijo «Guille», conformada para cometer múltiples delitos como amenazas, lesiones y homicidios.
En 2000, había sido condenado por la Justicia Federal de Corrientes por tráfico de marihuana.
