Polémica condonación de deuda a espacios culturales

“Esto es política de excepción”.

Ante la polémica suscitada por la aprobación en el Concejo de una condonación de deudas de impuestos municipales a sitios culturales, Alejandra Gómez Sáenz remarcó que “el beneficio debería ser para todos y todas”. Y recordó que presentó un proyecto similar el año pasado, que no prosperó, y que “apuntaba justamente a crear una norma común”.

Luego de que se le diera luz verde a una propuesta de condonar deudas a algunos sectores afectados por la pandemia, entre ellos los espacios culturales, la concejala del Frente de Todos – PJ  señaló que “se dio la discusión en el recinto y se terminó aprobando”, pero aclaró: “Por supuesto que a eso no nos oponemos y si existe una posibilidad hay que llevarla adelante, porque son espacios que la han pasado muy mal en este año largo de pandemia.

Pero nosotros, ya en junio del año pasado, teniendo en cuenta la situación de emergencia de los sitios que promueven la cultura en la ciudad, presentamos un proyecto que tenía que ver justamente con esto, con eximir del pago de TGI y Drei a esos espacios durante 12 meses. Ese proyecto, que fue muy discutido en el Concejo pero nunca pasó de la Comisión de Presupuesto, era muy similar a este pero con una pequeña y gran diferencia: era para todos”.

“Aprobando ese proyecto, se abría la posibilidad de que el acceso a esta herramienta de condonación de deuda o eximición del pago, fuera equitativa”, continuó Gómez Sáenz, y fustigó: “Lo que se está haciendo ahora es una política de excepción, porque lo que necesitamos es una norma común que democratice el acceso a ese beneficio porque si no, lo que termina sucediendo es que algunos espacios se enteran, por alguna cercanía o porque cuentan con ciertas herramientas que los vinculan a las instituciones, y otros no. Y éstos últimos, como casi siempre, se terminan quedando afuera”.

Tras remarcar que “son muchísimos los espacios que han tenido que cerrar sus puertas porque no pudieron afrontar tantos meses sin generar ingresos, y que de haber podido contar con esta posibilidad les hubiera significado un respiro muy grande”, la edila argumentó: “Cuando presentamos el proyecto indicamos que no iba a alcanzar para salvar la situación general que atravesaba el sector, pero sí que iba a ser un aporte muy importante desde el Estado municipal, del cual en su momento fuimos muy críticos y señalamos la falta de decisión.

Por eso hicimos aquella presentación, porque entendíamos que de esa manera se podía dar respuesta al reclamo de quienes realmente la estaban pasando muy mal. Y aquí vale la pena destacar que desde la provincia sí se llevaron adelante políticas públicas para acompañar económicamente a los espacios y también a los trabajadores y trabajadoras de la cultura”.

Luego de aclarar que “hay tiempo para remendar el error y poner a todos los actores del campo de la cultura en pie de igualdad para encarar este año donde la pandemia continúa y las actividades se llevan adelante con capacidad acotada”, la concejala peronista concluyó: “El desafío es empezar a levantarnos.

Hubo mucho acercamiento entre distintos espacios, sobre todo entre los más pequeños o que menos recursos tienen, para trabajar mancomunadamente y encontrar soluciones colectivas, pero el Estado municipal debe estar a la altura y ofrecer un acompañamiento. Pero eso sí, que sea equitativo y democrático”.