Este martes familiares y amigos de Tomás Rodríguez “Topa” se concentraron en las puertas de Tribunales provinciales de calle Balcarce al 1600, para visibilizar el pedido de Justicia que se viene escuchando desde el día del fallecimiento del joven de 14 años tras tocar una reja electrificada de un kiosco de calle Bouchard al 2100 de la vecina localidad de Funes, el 30 de noviembre del año pasado, donde comprobaron una serie de irregularidades, no solo por parte de la propietaria del comercio y del electricista, sino también de la EPE, defensa civil y municipalidad.
Sumado el secuestro de Raúl Rodríguez, papá de Tomás, cuando el Intendente de Funes estaba por inaugurar las sesiones ordinarias del Concejo de esta localidad.