El secretario de Obras públicas del Ejecutivo expuso en el Concejo el funcionamiento del área.

La Comisión de Obras Públicas del Concejo recibió al funcionario José Luís Conde es el secretario de Obras Públicas que detalló sobre el funcionamiento del área.

La reunión se desarrolló en el anexo Alfredo Palacios y condujo el encuentro de este martes 29 de marzo el presidente de la comisión, Martín Rosúa de la Unión Cívica Radical / Juntos por el Cambio.

En la audiencia prevista los ediles recibieron al secretario de Obras Públicas de la Municipalidad de Rosario, José Luís Conde para saldar consultas. Rosúa detalló sobre el funcionamiento de la comisión y mostró preocupación respecto a los pedidos de vecinos que son trabajados por la misma pero que no se efectivizan en una respuesta concreta. Por tal motivo sugirió la posibilidad de realizar un trabajo en conjunto. Asimismo, se le acercó un listado de preguntas realizadas previamente por los concejales.

Respecto a la propuesta, el funcionario se mostró predispuesto a mantener un canal de diálogo y precisó que “hay cinco direcciones generales de las cuales tres son operativas: Hidráulica; Arquitectura, y Pavimento y Calzada, con un presupuesto que autoriza Hacienda y que se destinan en un 80 por ciento a pavimento, 14 para Arquitectura y el 6 restante a Hidráulica. Luego alguien debe definir y tomar decisiones”, aclaró.

Por otra parte, Conde mencionó que se realizan licitaciones anuales para bacheo asfáltico “tres empresas tienen dos distritos cada una. Luego hay otra, es decir un cuarto contrato, que es bacheo de hormigón y que tiene injerencia en toda la ciudad”. También aclaró que muchas obras de mayor magnitud son financiadas por el gobierno provincial incluso también por el nacional.

Ante las dudas plantadas respecto a la calidad de los materiales, su ejecución técnica y el plazo de garantía, el funcionario remarcó que son y se hace como corresponde y cuando algo de eso falla se detectan en inspecciones que se hacen sobre el hormigón. «A los 28 días se saca un bocado del mismo que se manda para analizar y saber si el trabajo está bien hecho», explicó.

Rosúa cuestionó sobre la ecuación de estar permanentemente arreglando algo o solucionarlo de una solo vez. Sobre esto, Conde precisó que existen bacheos chicos y otros muchos más grandes y que cuando la cantidad de arreglo de bacheo supera lo económicamente conveniente se hace carpeta en la cuadra entera.

A su turno, Salinas consultó sobre la posibilidad de tener maquinarias propias para evitar contratar empresas privadas. A lo que el funcionario respondió que «el problema está en el régimen laboral del empleado público que trabaja seis horas de las cuales, solo se pueden considerar tres, por las demoras que le ocasionan su llegada a la base y la derivación a la obra y viceversa».

En los tramos finales de la reunión, retomaron la idea de generar un espacio de trabajo conjunto y acordaron tener un nexo de comunicación entre la comisión y la Secretaría para poder optimizar el mismo. También realizar un nuevo encuentro en un plazo breve a fin de responder sobre los interrogantes planteados. Salinas además propuso que pueda existir una especie de “pre opinión” del Ejecutivo sobre los expedientes que están en tratamiento y refieren a la temática.

Participaron de la reunión de comisión el vicepresidente Pedro Salinas, de Ciudad Futura y el resto de los integrantes conformados por María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular; Lisandro Cavatorta, de Todos Hacemos Rosario; Miguel Ángel Tessandori, del Volver a Rosario y Ciro Seisas, de Arriba Rosario.

La actividad en el río fue uno de los temas analizados en la Comisión de Producción

En la reunión de la Comisión de Producción del Empleo debatió en torno a proyectos vinculados al Paraná, y analizaron un proyecto de ordenanza presentado por Ciro Seisas, de Arriba Rosario, que crea el programa “Respeto en el Río» para impulsar políticas locales que generen un mayor aprovechamiento de los recursos turísticos, deportivos y recreacionales del río Paraná. La iniciativa contempla las “buenas prácticas ambientales con el debido cuidado y respeto del humedal”.

La reunión se llevó a cabo en el Anexo «Alfredo Palacios» y estuvo presidida por Silvana Teisa, de Todos Hacemos Rosario; e integrada también por Julia Irigoitía del mismo bloque; Ciro Ceisas, de Arriba Rosario; Caren Tepp, de Ciudad Futura; Susana Rueda, de Rosario Progresista; Martín Rosúa de UCR-Juntos por el Cambio, y Ana Martínez, de Unión Pro-Juntos por el Cambio.

En el encuentro, Seisas argumentó acerca de su iniciativa: “Pensamos en un proyecto para coordinar acciones teniendo en cuenta que es un área de competencia nacional. Por eso planteamos impulsar una agenda para trabajar junto a Prefectura”.

Al ser consultado por sus pares sobre el alcance del proyecto, el concejal de Arriba Rosario explicó que se propone «un uso público, gratuito e irrestricto del río», con una mirada puesta inicialmente en las embarcaciones livianas.

Al respecto, Martínez planteó la necesidad de incluir en el debate a todos los actores vinculados a distintas actividades que se realizan en la costa ribereña, incluido al sector privado.

Por su parte, Tepp recordó que Marina Magnani, de Todos Hacemos Rosario, presentó un proyecto similar que perdió estado parlamentario; y se refirió a un pedido de informes impulsado por la ex concejala Alejandra Gómez Sáenz, sobre la necesidad de acceso ribereño en los bajos del Saladilo. En esa línea, solicitó que se los incluya en el tratamiento.

Rosúa mostró interés en legislar sobre la actividad en el río Paraná ya que “en los últimos 15 años se cambiaron los usos” y coincidió con Martínez, en convocar a todos los actores involucrados.

Por otra parte, Tepp propuso el tratamiento de una propuesta de María Luz Ferradas y demás integrantes de Ciudad Futura, que crea el programa “Romper el Molde”, en la esfera de la Secretaría de Producción y Empleo de la Municipalidad de Rosario, con la finalidad de generar herramientas financieras que permitan a productores locales ampliar la tabla de talles que producen, adecuándose a la ley nacional 27.521 que establece el Sistema Único Normalizado de Identificación de Talles de Indumentaria.

El proyecto propone incentivos económicos destinados a los prouctores que adhieran al porgrama y se comprometan con el cumplimiento con el sistema único de talles.

«El municipio no tiene competencia en sancionar, pero sí puede promover y estimular», fundamentó Tepp.

Rosúa manifestó su acuerdo con el espíritu del proyecto, aunque planteó que se debe analizar en profundidad el otorgamiento de beneficios a través de líneas de crédito del Banco Municipal de Rosario o reducciones en el Derecho de Registro e Inspección (Drei), por el impacto que esos incentivos puedan tener el presupuesto general del municipio.